Se acaba el año y es aquí cuando comenzamos a hacer propósitos para el siguiente año, muchas cosas buenas, pero ¿no es la misma historia del año pasado? ¿No nos hicimos propósitos también? ¿Cuántos cumplimos?, y la verdad es que muchos de nosotros tenemos simplemente ¨la buena intención¨ pero no tomamos la decisión de cambiar eso que hicimos mal, o que en efecto ni siquiera hicimos, y cuando el idealismo no se hace pragmático, no sirve de nada no es mas que solo ganas de hacer bien las cosas y nada mas…
Cierto día estaba pasando los canales de la TV y me tope con
la biografía de una banda de rock de los 90 no es muy conocida mundialmente
pero en argentina causo furor en su década, bueno le preguntaron al vocalista
que como había salido de su alcoholismo, y dijo unas palabras que jamás
olvidare: ¨querer hacer o dejar de hacer algo no es solo cuestión de
pensarlo, es anhelarlo y tener la firme convicción de lo que quieres, y
entonces es cuando actúas¨, palabras
que me dejaron sin aliento y pensé cuanto hemos perdido las personas por querer
superficialmente las cosas, ahora para este nuevo año que se avecina fijemos
prioridades que es lo que realmente queremos, podemos y estamos dispuestos a
hacer.
¨Simplemente si no hubieran personas decididas, no tuviéramos
lo que tenemos, no obstante si no hubieran indecisos, no nos faltara lo que nos
falta¨